He probado varias recetas pero definitivamente esta es la más rica o la que más me gusta lejos! El toque de la mantequilla de maní es espectacular. Le da un sabor exquisito! Son muy fácil de hacer, ensucian un solo bowl y además no hay que amasar nada y pueden guardar masa congelada para cuando quieran!
Una opción riquísima y sin fritura! La magia está en el rebozado y la cocción. Obvio que pueden hacerlo con la parte de pollo que prefieran también y en pedazos mas pequeños tipo finger food va a pleno!